Categorías
La casa de Lanudo

Oficio de poeta (I)

Esa era la vida del poeta…

(Microrrelato)

Decidí hacerme poeta el día que gané el concurso de lectura en la clase de segundo de primaria. El premio fue un libro de Pinocho y un lápiz con un borrador de figurita que no se grabó en mi memoria. Luego de eso vino la fama, las lecturas de poesía patriótica cada lunes de septiembre, las odas a los grandes hombres de la historia, recitales bajo el ardiente sol de la mañana hasta que la directora daba por concluido el acto cívico con un “todos vuelvan a sus clases” y nosotros, los poetas, bajábamos del escenario para incorporarnos a las pobladas filas de cabezas piojosas y sudadas, pensando que el próximo poema debía ser más largo. Esa era la vida del poeta: declamar las glorias de otros hombres que no éramos nosotros.

Por Jonatan Rodas

Cuentista, relator, memorioso. Escritor por urgencia, necesidad y vicio.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.