1. Exílio, esse lugar sem nome. Não se reconhece mais a paisagem nem semelhança com outro país. Um outro estado, mesmo artifício da luz filtrada pela janela. Cidade em trânsito – sitiada pelo desconhecido rosto envelhecido da tarde. Não há parâmetro para quem chega desapercebido pelo atlântico, ou por um outro oceano qualquer. E aquela colina suspensa indica os sonhos que se dissipam sobre a noite, como outra noite qualquer se não fosse obtusa essa estranha miragem. Exilio, Ese lugar sin nombre. No se reconoce más el paisaje ni semejanza con otro país. Otro estado, incluso un artificio de la luz filtrada por la ventana. Ciudad en tránsito ― sitiada por el desconocido rostro envejecido de la tarde. No hay parámetro para quien llega desapercibido por el Atlántico o por cualquier otro océano. Y aquella colina suspendida indica los sueños que se disipan sobre la noche, como otra noche cualquiera si no fuera obtuso ese extraño espejismo. 2. A palavra cala todo vestígio: Como salvar um corpo em declínio Imerso em pleno mar. Um peso uma réstia um ato da criação; a tentativa de dizer algo novo sob formas gastas. Um mergulho ciente de que voltar à superfície é encontrar o caminho de volta para a casa. A imensidão das águas, o puro artifício das imagens tecendo uma frase, um discurso, um prólogo. Encontrar o sentido do que se escreve: um exercício resignado de medo e de cura onde nada se cala e tudo é silêncio. 2. La palabra calla todo vestigio: Cómo salvar un cuerpo en declive Inmerso en pleno mar. Un preso, una racha, un acto de creación: la tentativa de decir algo nuevo bajo formas gastadas. Una inmersión consciente de volver a la superficie es encontrar el camino de vuelta para la casa. La inmensidad de las aguas, el artificio puro de las imágenes tejiendo una frase, un discurso, un prólogo. Encontrar el sentido de lo que se escribe: un ejercicio resignado de miedo y de curación donde nada se calla y todo es silencio. 3. O rosto é a maior de todas as ficções fixo no esboço do tempo perdido entre um mero semblante que declina sua face no anonimato das ruas estreitas, em que a multidão acena alguma paragem que lhe marque o vinco das primeiras rugas de expressão – como aquele sorriso fino ao lhe reconhecer perdido entre muitos: ao dar a primeira face ficamos marcados no rastro de um pequeno incêndio. 3. El rostro es la mayor de todas las ficciones fijo en el esbozo del tiempo perdido entre un mero semblante que declina su cara en el anonimato de calles estrechas cuando la multitud agita algún paraje que le marca el pliegue de las primeras arrugas de expresión – como esa delgada sonrisa cuando te reconozco perdido entre muchos: al dar la primera cara, quedamos marcados en el camino de un pequeño incendio.
Recomendamos leer nuestras entradas de poesía en la versión de escritorio.
Fernanda Fatureto (Brasil, 1982) es poeta y escritora. Autora de Ensayos para una caída (Penaluz, 2017) e Intimidad inconfesable (Patuá, 2014). Posee poemas en revistas literarias brasileñas; en las revistas portuguesas Eufeme e InComunidade; en las revistas españolas Cuaderno Ático y Liberoamérica y en la revista mexicana El periódico de las señoras.
Traducción de Leo de Soulas.